• 05 NOV 18

    ¿Por qué se desgasta el esmalte dental?

    En contra de la creencia popular, las limpiezas dentales profesionales no dañan el esmalte; sí lo hacen la abrasión, los alimentos y bebidas ácidos, el bruxismo o el cepillado agresivo

    Una pregunta que escuchamos muy a menudo en Clínica Cervera es: “¿Las limpiezas dentales desgastan el esmalte?”.


    La limpieza dental o profilaxis elimina la placa bacteriana y el sarro de la boca, además de hacer desaparecer las manchas externas de los dientes causadas por el café, el tabaco, el vino tinto… Para llevarla a cabo, los dentistas utilizamos aparatos sónicos y ultrasónicos que, a través de ondas vibratorias, rompen el sarro de la superficie del diente, así como el uso manual de curetas sin afectar para nada al esmalte dental. Por tanto, una limpieza dental profesional nunca daña el esmalte, del mismo modo que no dañamos el cristal de las ventanas de nuestra casa por limpiarlas diariamente, siempre que utilicemos los materiales y el procedimiento adecuados. 


    El esmalte dental es la sustancia más dura de nuestro organismo, pero no por ello es indestructible. ¿Qué puede provocar entonces su desgaste? 


    • Abrasión. Los blanqueamientos caseros a base de bicarbonato y limón, por ejemplo, son abrasivos y pueden terminar erosionando el esmalte dental. 


    • Abuso de alimentos y bebidas ácidos. Las bebidas energéticas, los refrescos, el vinagre, el vino, el zumo de cítricos, etc. contribuyen a la erosión de los dientes. 


    Bruxismo. Una de las consecuencias del apretamiento dental es el desprendimiento del esmalte en el cuello del diente (abfracción dental); en este caso, con forma de cuña. Esta pérdida del esmalte dental da lugar, a su vez, a sensibilidad extrema.  


    • Cepillado agresivo. Si apretamos demasiado el cepillo contra nuestros dientes o encías, nos cepillamos con demasiada frecuencia cada día o empleamos una técnica inadecuada, también podemos sufrir abfracciones dentales. 


    Consejos para cuidar el esmalte dental

    “Más vale prevenir que curar” dice el refrán. Y en el caso del esmalte, la prevención es especialmente importante ya que no se regenera. Por eso, desde Clínica Cervera te ofrecemos unas recomendaciones para cuidarlo.


    1. En la higiene bucodental.

    - Cepíllate los dientes 2-3 veces al día durante dos minutos. 

    - Si has consumido alimentos ácidos, enjuágate la boca y espera 30 minutos para cepillarte. 

    - Usa una pasta dental con flúor, que ayuda a reforzar el esmalte dental. 

    - Evita técnicas de cepillado traumáticas. No hagas presión ni frotes el cepillo de forma agresiva.


    2. En la alimentación. 

    - Reduce el consumo de alimentos y bebidas ácidos. Si tomas zumos ácidos o azucarados a diario, utiliza una pajita para minimizar el contacto del líquido con los dientes.  


    3. Visita periódicamente a tu dentista, quien puede detectar si existe desgaste del esmalte dental y por qué, así como ofrecerte consejos de protección personalizados y productos innovadores que reparan el esmalte dental.