Colutorios: Por qué no deberías usar enjuague bucal sin la prescripción de tu dentista
Elegir o usar incorrectamente el colutorio puede provocar efectos indeseados para la salud de tu boca
Seguro que los has visto en más de un anuncio. Los colutorios o enjuagues bucales son protagonistas de mucha de la publicidad que vemos a diario. Esto ha propiciado que su consumo se haya extendido entre la población: más del 60 % de los españoles usa colutorios diariamente, según la última edición del Libro Blanco de la Salud Oral (2015) del Consejo de Dentistas de España. Aunque es un producto con grandes beneficios para nuestra boca, no debemos elegirlo por su color, sabor o precio, sino por la recomendación de nuestro dentista. De lo contrario, podría provocarnos algunos efectos no deseados…
Aunque la combinación más efectiva para eliminar la placa bacteriana es el cepillado dental y los métodos de limpieza entre dientes (hilo o cepillos interdentales), la mayoría de la gente opta por el cepillado y el colutorio. Incluso muchas personas consideran que el colutorio es suficiente para eliminar la placa y que, por tanto, puede sustituir al cepillado.
¿Los colutorios sustituyen al cepillado o al hilo dental?
¡Rotundamente, no! Son un complemento más para la higiene oral, sobre todo para las zonas de difícil acceso (partes posteriores, lengua…). Lo adecuado es cepillarnos los dientes al menos dos veces al día, durante dos minutos, con pasta de dientes fluorada, y hacer una limpieza interdental al menos una vez al día. Sin embargo, algunas personas necesitan una ayuda extra, ya sea de forma puntual (tras una cirugía o por una infección aguda) o como complemento de su higiene oral, sobre todo en personas de mayor edad o en pacientes médicamente comprometidos e inmunodeprimidos o con limitaciones físicas o psíquicas, entre otros. Es en estos casos en los que los enjuagues bucales se convierten en una herramienta complementaria eficaz y fácil de usar, siempre y cuando esté indicado y sepamos cómo utilizarlo.
¿Qué problema hay si lo elijo por mi cuenta?
El enjuague bucal es una solución acuosa de principios activos que previenen y tratan distintos problemas. Los hay que combaten infecciones bucales (antisépticos), previenen las caries dentales, tratan la sensibilidad dental, la halitosis (mal aliento), la xerostomía (sequedad bucal)… Aunque el colutorio es seguro, debemos utilizarlo correctamente, siguiendo las indicaciones del producto (número de enjuagues, tiempo y dosis) y del dentista que lo receta para conseguir el efecto beneficioso y evitar efectos secundarios.
Si usamos diariamente un colutorio que no se ajuste a nuestras características y necesidades particulares y, además, lo hacemos de forma incorrecta, podría provocarnos sarro, tinciones en los dientes e incluso otro tipo de problemas.
En conclusión, el enjuague bucal puede ser un complemento excelente para nuestra higiene bucodental siempre y cuando nos lo prescriba nuestro dentista y sigamos sus indicaciones para uso.
