Chicles y caramelos con xilitol, los mejores aliados para la salud bucodental
Los principales beneficios de los chicles y caramelos “sin azúcar” son el aumento de la salivación y la prevención de la caries dental
“Cuando no tienes tu cepillo, tienes tu chicle sin azúcar”. “Mascar chicle sin azúcar ayuda a proteger tus dientes”. “Chicle sin azúcar para unos dientes limpios y sanos”. Estas son algunas afirmaciones que podemos leer o escuchar en los anuncios publicitarios de chicles sin azúcar. Pero… ¿Cuánto de verdad hay en ellas? ¿Y qué dice la letra pequeña que no alcanzamos a leer? Desde Clínica Cervera te explicamos los pros y los contras de masticar chicle sin azúcar para la salud oral.
Beneficios de los chicles y caramelos con xilitol
Su consumo produce un aumento de la producción de saliva, lo que supone una mayor cantidad y concentración de bicarbonato e iones remineralizantes, que neutralizan los ácidos que se forman en la placa dental y que causan la caries.
La estimulación de la segregación de saliva también potencia el mecanismo de autoclisis, esto es, de “autolimpieza”. Al masticar chicle sin azúcar retiramos restos de alimentos que quedan en nuestros dientes, al igual que ocurre cuando comemos alimentos con fibra, como la manzana o la zanahoria. Pero este “barrido” de desechos sólo tiene lugar en la cara oclusal de los dientes, que es la zona con la que masticamos. Sin embargo, la parte que más bacterias alberga es la más cercana a la encía. Por ello, mascar chicle sin azúcar NUNCA podrá sustituir al cepillado.
Además, el xilitol no puede ser fermentado por las bacterias presentes en la boca, lo que inhibe la producción de ácidos en la placa, el mal aliento y la periodontitis o “piorrea”. También en este punto tenemos un pero y es que una ingesta abusiva de sorbitol tiene efectos laxantes, según un estudio publicado en la British Medical Journal.
Perjuicios del chicle sin azúcar para la salud bucodental
Algunas personas mastican chicle para relajarse pero, en realidad y probablemente sin saberlo, obtienen un resultado diametralmente opuesto. Según la Sociedad Española de Disfunción Craneomandibular y Dolor Orofacial (SEDCYDO), este hábito acentúa la disfunción de la articulación temporomandibular (entre el hueso temporal y la mandíbula), que es la que nos permite mover la mandíbula.
Los dientes superiores e inferiores sólo deben contactar entre sí durante 20 minutos al día, durante la masticación y la deglución (tragar). Si este tiempo aumenta sobremanera como consecuencia del hábito de mascar chicle, pueden surgir problemas de sobrecarga, e incluso, de desgaste de los dientes. Es por ello que el chicle no está recomendado para pacientes con bruxismo.
En resumen, el xilitol se ha convertido en uno de los principales COMPLEMENTOS de las medidas preventivas de la caries dental: dieta equilibrada, buenos hábitos de higiene bucal y visitas periódicas al dentista.