5 consejos prácticos para mantener la boca sana durante las vacaciones
Cómo evitar que el verano le pase factura a tu sonrisa
Nos encanta el verano. Los días se alargan y tenemos más horas para hacer lo que nos gusta. Sin embargo, a nuestra boca se le acumula el trabajo porque son días de no parar por casa, de mucho picotear y de algún que otro exceso... Por ello, hemos recopilado 5 consejos prácticos que te ayudarán a mantener intacta tu sonrisa durante las vacaciones veraniegas.
- 1. No sin tu cepillo de dientes
Obvio, ¿verdad? Pero no nos referimos sólo a llevarte el cepillo de dientes si sales de viaje, sino a llevarlo siempre contigo, en tu bolso o mochila, aunque no tengas pensado viajar. El verano es muy propicio a la improvisación y son muchos días los que terminamos comiendo o durmiendo fuera de casa sin haberlo planeado. Llevar el cepillo encima no es ninguna carga: los hay de viaje, con un tamaño muy reducido, y ni siquiera es necesario que lleves dentífrico ni colutorio. Lo que realmente limpia las bacterias es el barrido del cepillo. ¡No necesitas nada más! Bueno, si le sumas el hilo dental, te damos matrícula de honor. - 2. ¿Comes fuera de casa?
Si te has pasado por alto nuestro primer consejo y tus amigos te han reliado y has terminado almorzando fuera de casa, aún tenemos algunas opciones para paliarlo: consume alimentos con fibra, como zanahorias o manzanas, que limpian tus dientes al masticarlos; termina las comidas con alimentos que ayuden a neutralizar la acidez de la boca, como el queso; y mastica chicle sin azúcar y con xilitol, que ayuda a generar más saliva y, por tanto, protege nuestro esmalte. Además, intenta evitar en la medida de lo posible los aperitivos o tentempiés muy dulces o muy salados. Aunque todos estos consejos son útiles, no sustituyen en ningún caso al cepillo de dientes ni al hilo dental. - 3. Hidratar los labios no es coquetería
Seas hombre o mujer, mantener nuestros labios hidratados y protegidos con un fotoprotector no es una cuestión de coquetería, sino de salud. Hacerlo nos ayuda a prevenir el cáncer en esta parte de la boca. Por otra parte, mantén siempre la boca hidratada ya que la sequedad bucal nos hace propensos a las infecciones e inflamaciones. - 4. Controla los excesos
No hablamos sólo de las bebidas alcohólicas, sino también de las energéticas o isotónicas, del café, del tabaco, de productos procesados con azúcares… Todas estas sustancias pueden dañar y amarillear el esmalte. Además, fumar disminuye el flujo salival, contribuye a la aparición de manchas e incluso incrementa el riesgo de padecer caries, gingivitis y cáncer. Por tanto, deja todo esto a un lado o minimiza al máximo su consumo. - 5. ¡Ojo con los golpes!
En verano debemos ser especialmente precavidos con los traumatismos dentales ya que aumentan un 30 % . Es muy recomendable el uso de protectores bucales en el caso de que practiquemos actividades deportivas y del casco integral en cualquier desplazamiento en vehículo de dos ruedas.